Tristán e Isolda es una de las historias inmortales de la literatura. Está considerada como una de las más grandes historias de amor, no solo por la belleza de su singular historia, sino por la fuerza de la pasión desbocada entre ambos protagonistas. Es un cuento para aquellos que aman, no para los demás, así mismo nos lo cuenta M. Bédier.
La historia de Tristán e Isolda, nos cuenta como el caballero Tristán, ejemplo del perfecto caballero, decidido a servir lealmente a su rey, el rey Marcos de Cornualles, decide conseguir a la inaccesible Isolda. Para desgracia de ambos, beberán por error una pócima que los hará amarse hasta la muerte. Esto dará pié a encuentros y desencuentros entre ambos, que intentarán ocultar su amor al rey Marcos.
Joseph Bédier, erudito francés y discípulo de Gaston Paris, se dedicó a recuperar textos imprescindibles que yacían olvidados en los archivos franceses. Este libro, según palabras del mismo M. Paris, no hubiera existido si el poema de Tristán e Isolda estuviese completo. Así pues, Joseph Bédier, literalmente, se vistió de juglar, se armó de todos los fragmentos existentes y decidió componer una versión lo más completa posible. Evitando trastocar los poemas originales y manteniendo el estilo de un poeta medieval. El poema, para que nadie se sorprenda, está dispuesto en prosa.
Al libro le doy un 8, ya que tiene algunos fallos en la maqueta, y algún que otro desliz. La traducción corre a cargo de Lluís Maria Todó. Personalmente opino que habría sido recomendable traducir los poemas que abren cada capítulo. Éstos fragmentos provienen de las distintas versiones de Tristán e Isolda y están escritos en sus respectivos idiomas, los cuales van desde el alemán antiguo hasta el occitano.