Tras un tiempo de descanso retomo el blog con una simpática comedia, recomendada por mi librero habitual, Sr. Adolfo Lopez Chocarro. La novela me ha hecho pasar un buen rato: el estado de constante inopia del protagonista, la pedantería de su acompañante, los personajes y situaciones disparatadas que van sucediéndose y la mordaz narración, hacen que éste sea un libro muy recomendable.
El viaje involuntario de un suicida por afición, como bien he dicho antes, es una comedia. En ella, Harold, un hombre que roza los cincuenta años, y que tiene una vida aburrida y previsible, pese a suicidarse por afición, es despedido de su trabajo y se topa con Melvin, un niño de once años, superdotado y pedante, que le obligará a ayudarle en la búsqueda de su padre.
Esta vez no os podre decir gran cosa del autor, Einzlkind, pues usa un seudónimo y no se puede averiguar absolutamente nada sobre él.
La edición, como viene siendo una constante en Siruela, ralla la perfección: buena presentación, buen papel, ningún fallo ortográfico, etc... El trabajo de traducción, elaborado por Javier Sánchez-Arjona Voser, se puede decir que es muy correcto. Quizás el único fallo reseñable sea que, la maquetación, está algo ajustada al lomo, lo cual dificulta un poco la lectura.
Paso a darle una puntuación de 9 puntos; pues el libro, como bien he dicho, ralla la perfección: la edición está muy cuidada; además de ser divertido. Personalmente os lo recomiendo.
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